Análisis histórico de la vida de las esposas y amas de casa
Con la siguiente parábola ilustro el método de exposición que suelen usar los analistas de riesgos en Colombia con el fin de recomendar a los entes públicos la compra de los seguros contra terremoto.
Esta jocosa narración muestra cómo se puede desconocer el análisis concreto de la situación concreta, sin cuyo acatamiento todo documento resulta distorsionado y carente de veracidad. El texto es el siguiente:
Es preocupante la situación de las mujeres, pobrecitas, metidas en sus casas sin diversión alguna, sobrecargadas de trabajo. Analicemos tres casos:
1. A la pobre Helga solo la saca de vez en cuando su marido Olafo a un restaurante, pero noche tras noche debe desvelarse -tras una dura jornada de trabajo doméstico-, esperando a que el borracho de Olafo llegue a media noche después de compartir con sus amigotes.
2. Y la mamá de Calvin, pobrecita también. Solo la saca al campo su marido cuando tiene vacaciones y la lleva esporádicamente a un restaurante, pues la niñera Rosalyn le cobra mucho dinero por reemplazarla y darse el lujo de maltratar al malvado y malquerido Calvin.
3. Y no es menos dura la vida de la mamá de Mafalda. Tiene dos hijos, trabaja todo el día todos los días, no tiene la suerte de ir a un restaurante, nunca la invita su marido, pues no tiene niñera que la reemplace, y solo tiene derecho a acompañar a su marido a la playa cuando él disfruta de sus vacaciones.
De verdad, la vida de las mujeres es muy dura.
Como se puede apreciar, análisis de este tipo carecen de cientificidad y de argumentos para la toma de decisiones.
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